Istmo Beach And Jungle Bungalows
Servicios principales
- The lagest option:
- 8 huéspedes
- 3 camas
- 2 dormitorios
Ubicación
Si te alojas en la Istmo Beach And Jungle Bungalows, podrás visitar la Iglesia De San Carlos, situada a unos 4 km.
Esta villa se encuentra a unos 25 minutos a pie del Río Mar. Entre los lugares educativos cercanos se encuentran el Panama Surf School, a unos 10 minutos en coche.
Los cuartos de baño también disponen de inodoro separado y ducha. Se incluye toallas para mejorar tu comodidad.
Los huéspedes tienen a su disposición una zona de comedor con servicio de tetera/cafetera. La cocina también dispone de nevera. La distancia al aeropuerto Scarlett Martinez es de unos 25 km.
Reseña de un crítico de hotel
Recientemente tuve el placer de disfrutar de una escapada en Istmo Beach And Jungle Bungalows, un rincón secreto en la selva panameña. El ambiente es un verdadero santuario de paz, ideal para desconectar del bullicio diario; aquí, despertar rodeado de árboles frutales y el canto de aves es una experiencia que despierta todos los sentidos. La atención de los dueños, John e Isha, es impresionante; John es un chef talentoso que nos sorprendió con sus cenas exquisitas, mientras que Isha ofrece clases de yoga que realmente elevan el espíritu. Aunque el menú es limitado, cada plato es un deleite que se acompaña de jugos de frutas naturales en el desayuno, simplemente delicioso. Los bungalows son acogedores y cómodos, con un toque rústico que se integra perfectamente en la naturaleza. Lo único que podrían mejorar sería el ruido de la heladera por las noches, pero eso no opaca la atmósfera mágica del lugar. Además, la cercanía a una playa hermosa, a solo 8 minutos caminando, con arena suave y aguas tranquilas, es el lugar perfecto para relajarse después de un día de yoga o meditación. Sin duda, Istmo Beach And Jungle Bungalows es un lugar que volvería a visitar. Con sus instalaciones que promueven la relajación y la conexión con la naturaleza, es el escape perfecto para quienes buscan un respiro en su vida cotidiana. ¡No olviden disfrutar de las hamacas!